Pues yo no la veo de Reina de España. Por Luis Alberola

Cada vez que veo a esta chica, me viene a la memoria aquella canción de los BURNING, seguro que tiene algún tipo de explicación.

La dama en cuestión (vamos a ser educados) se está “preparando”, como su papá, para ser la futura Reina de las Comunidades Autónomas Ibéricas de los Estados Unidos de Europa. Yo no la veo de Reina de España, pues me temo que algo pasará antes. O la Casa Real cae (pues fue el Caudillo quien la recuperó y todo lo que hizo el Jefe del anterior Régimen lo van derrumbando, como las cruces, los monumentos, los escudos o los pantanos) o la que cae es España, pues el país está totalmente quebrado; más o menos en llamas y en manos de holgazanes, traidores, corruptos, malhechores, oportunistas, golpistas, separatistas y terroristas.

Yo no sé qué tipo de patriotismo habrá desarrollado la rubia, pero me da la sensación de que está ahí porque no le queda otro remedio, que lleva la banderita de España en el uniforme como si llevara un parche de Los Ángeles Lakers. Últimamente se le ha visto con una gorra con una visera que le tapa toda la cara; me recuerda a aquellos jugadores catalanes de la Selección Española (antes España) que se escondían la insultante y vergonzosa franja rojigualda de sus medias.

Voy a tutear a la hija del actual Rey y de su (aún) esposa.

Creo que sabrás que a buena parte del Pueblo Español no les gustáis, pues vuestro reinado ha consistido en sostener vuestro chiringuito, sin más. Si alguien os aplaude y os felicita, o es un ignorante o es que está sacando un beneficio propio de que vosotros estéis ahí chupando del bote.

Seguro que en tu “preparación” no te hablan de unas cuantas cosas que yo pasaré a contarte, porque soy de los que aman a España porque no les gusta.

Hace unos cuantos años, en España hubo una guerra que enfrentó a los que querían que España desapareciera contra los que amaban a España. Un señor que se llamaba Francisco Franco, también conocido como El Caudillo o El Generalísimo, actúo de coordinador de un Movimiento Nacional, que hizo que el bando de los que amaban a España ganara.

España, Una, Grande y Libre (libre de Comunidades Autónomas, de la UE, del NOM y de la Agenda 2030, por ejemplo) prosperó, al paso alegre de la paz, hasta convertirse en la octava potencia mundial.

España podía estar orgullosa de su agricultura, de su ganadería, de la pesca, de su industria; España era visitada por millones de personas que querían disfrutar de ese país de ensueño. España era un ejemplo en cuanto a educación, seguridad social, orden, crecimiento demográfico o vivienda.

En España estaban los mejores artesanos, la mejor industria textil, no se pagaban prácticamente impuestos; las familias podían tener varios hijos, darles de comer, vestirlos, educarlos, darles estudios, darles una vivienda a cada uno. Las familias podían tener más de una casa, permitirse unas vacaciones, se podía fumar tranquilamente, había mucha libertad y mucho respeto. Cualquier municipio tenía una gran cantidad de negocios en las plantas bajas de los edificios, con los cuales poder ganarse la vida. En España se fabricaban automóviles, autobuses, barcos, aviones, tractores, electrodomésticos, muebles, todo lo que necesita una casa y en tu caso, todo lo que podrás ver en tu palacio…

Esto no es el cuento de Alicia (o Leonor) en el País de las Maravillas, esto era España hace unos cuantos años, las casas no necesitaban alarma, los niños jugaban tranquilamente en la calle o en el parque, no sufrían acoso escolar, no les daban la murga con leyes de género LGTBI+, la gente iba a los toros, al fútbol, a cazar, tenían perros, gatos o canarios, comían lo que les daba la gana (o lo que se podían costear), no necesitaban un teléfono ancho ni pagar comisiones en una cuenta corriente en el banco (o caja de ahorros).

La gente vestía bien, iban a misa en vez de al psicólogo (o psiquiatra) y eso del final de mes ni existía, ni las hipotecas… el dinero de los españoles recirculaba en los negocios de los españoles y no habían okupas, ni corruptos, ni inmigración (ilegal), ni pateras, ni buenismos excesivos. Había, prácticamente, pleno empleo. España era un país en el que todos los sectores estaban en auge. Se combatía el terrorismo y los separatismos.

Cuando este señor, del que te hablaba, falleció, llegasteis vosotros y un librito que se llama Constitución. Estarás conmigo que fuisteis vosotros los que la cagasteis…

Si te ha gustado mi historia tienes dos opciones: luchar por la verdadera España o decirle a tus papás que no cuenten contigo y dedicarte a otras cosas como muchos hijos de reyes han hecho a lo largo de la historia. Tanto una decisión como la otra, serán bien recibidas.

Por cierto, no hemos hablado de qué tipo de marido te gustaría tener…