Salomón, rey de Israel (978-931 a.C.) a su vez era hijo del rey David (1040-966 a. C.)
Mencionada en las »Mil y una noches». Describe allí, »un espejo mágico, grande, redondo, formado por una aleación de metales, fabricado por Salomón». Procopio de Cesarea también la menciona en el año VI, concretamente en »la guerra Gótica».
Podía con ella el rey salomón controlar los elementos y »los siete climas del Universo». Contendría también el nombre secreto de Dios, que, pronunciándolo, se podría crear con el, según la cábala. Con ello, el conocimiento supremo.
Otros dicen también que con la mesa, se podía ver el futuro.
Hecha de oro puro, perlas, rubíes y esmeraldas. Los reyes godos no paraban de enriquecerla.
»Itinerario» de la mesa. Nabucodonosor II se la lleva (junto con otros tesoros) a Babilonia al tomar Jerusalén en el 587 a. C. Ciro, se la devuelve a la ciudad. Llegó a Roma desde Jerusalén al tomar esta vez los romanos la ciudad en el año 70 d. C., y, entre los tesoros se llevaron la mesa de Salomón. El rey godo Alarico, saquea Roma en el 410 y se hizo con el tesoro. Luego, los visigodos, cuando se asientan en Toulouse, guardan la mesa en Carcasona, de donde se lo llevan los ostrogodos en el 507, tras la batalla de Vouillé. En el 526 Teodorico, rey de los ostrogodos, se lo devuelve a los visigodos. El rey de los visigodos Amalarico los traslada a Barcelona y después a Toledo.
Guardada durante siglos en la llamada »Cueva de Hércules», Toledo.
»Leyenda de la cueva de Hércules». El rey visigodo Rodrigo abrió cada candado, llegó a una primera sala, debía ser un lugar de oración, avanzó y llegó a una segunda sala, de ceremonias, después llegó a una tercera sala que tenía un cofre, el rey lo mandó abrir, había un lienzo con dibujos de guerreros a caballo y espadas curvas, con algo escrito que decía «cuando ojos humanos vean este lienzo, estas criaturas dominarán la tierra santa». Rodrigo no pasó a la cuarta sala, porque había dos guardias de metal de varios metros de alto armados con mazos que se movían a la más mínima presencia que entrara en la sala, (¿robots?), pero pudo ver que estaba la mesa de Salomón.
Según se dice, los árabes, la encontraron cuando tomaron Toledo. Varias versiones sobre el destino de la mesa. Desmontada por el Califa de Damasco, o en Roma. Dividida en partes, sus joyas adornan la Kabba de la Meca. Otros dicen que en realidad no salió de España, que sigue en Toledo o que está en Jaén, pues se ocultarían los tesoros ante el avance musulmán. Se dice también que el día en que se de con ella, significará que se acerca el fin del mundo (¿como una caja de pandora?).
