* La culpa de la dictadura socialista que se consolida no es del dictador Sánchez, del PSOE y sus aliados, sino de los otros, todos ellos: del rey, de las FFAA, de las policiales y de la oposición.
* Si España no hubiera estado tan podrida y desvariada como estaba, el Dos de Mayo no hubiera existido, ni sus terribles consecuencias tampoco.