Cuando escribo este artículo, 15 de noviembre, se está consumando el peor ataque a las libertades de nuestra nación y el mayor atentado al estado de derecho desde que estos mismos criminales socialistas con un pucherazo escandaloso dinamitaran la convivencia y nos sumergieran en un caos que provocó un enfrentamiento civil, no me importa repetirlo. Hoy, en el Congreso, estos criminales que encarnan un Frente Popular tan lamentable como el de antaño van a escenificar el final de la unidad de la patria ¿Y la respuesta de la oposición? Pues teniendo en cuenta que la derecha española es una basura cobarde y acomodaticia, desde la CEDA de Gil Robles, hasta todos los cambios de siglas llevados a cabo, desde la entrada de la nefasta transición hasta el caos de hoy día. Desde el traidor Fraga y ese engendro llamado Alianza Popular, hasta llegar al PP del ínclito Aznar y su total degeneración puesta en marcha por Rajoy y concluida por el imbécil de Feijóo, esta derecha acomplejada y podrida que tiene su lado «duro», por decir algo, en esa escisión de ellos mismos llamado VOX, otro fraude con patas muy cortas, lo único que hace es poner denuncias en esos tribunales indignos y completamente sojuzgados por el aparato del PSOE y escenificar declaraciones vergonzosas como las que hace un par de días lanzó, sin ponerse colorado, el palurdo Feijóo, amenazando con una huelga general de fin de semana con los sindicatos a favor y de cinco a siete de la tarde, vamos como el 151 del sinvergüenza de Rajoy. Esto es el horizonte espantoso que tenemos.
¿Y el pueblo soberano? Pues a lo suyo con sus móviles y sus mochilas, sus Netflix y sus vacíos cerebros, eso sí, como manada de borregos, a protestar puntualmente y sin romper un plato, siempre que no haga mucho frío, acudiendo a las concentraciones muy pacíficas desde las ocho y hasta que la indigna policía política del invertido Marlasca les cueza a palos. ¿Y lo de tomar las calles en serio y de continuo, con el apoyo de la sociedad civil encarnada en la totalidad de las instituciones del estado? ¿Y paralizar completamente el país hasta que este parón decida a los tontos del móvil a dejar de seguir narcotizados y darse cuenta de que estos cabrones solo quieren perpetuarse en sus poltronas y colocar en sus despachos las fotos de Chávez y Maduro y en sus casas, en nuestras casas, el hambre y la ruina total?
Con un rey incapaz de salvar en este gravísimo momento a España y con un ejército que no sirve para nada y unas fuerzas de seguridad vendidas por un plato de lentejas y con los oídos sordos y los ojos vendados ante sus muertos asesinados por estos que actualmente les mandan y lo que es mucho peor, les tiene enfrentados al pueblo, la solución es complicada y con estos mimbres pocos cestos se pueden hacer.
Seguir así sin reaccionar es el fin de todo. Terminar de forma radical y contundente con este cáncer es muy urgente, o ¿es qué en realidad nos importa una mierda el futuro de nuestros hijos? Lo que estamos viendo hoy es pulverizar la unidad de la patria. ¿Vamos a reaccionar afrontando esta peligrosa realidad? o ¿Estamos de broma?