Hoy, 7 de octubre, festividad de Nuestra Señora del Rosario, “La Galeona”, se cumplen 452 años del glorioso triunfo de las armas españolas en la batalla de naval de Lepanto (1571)
“La más memorable y alta ocasión que vieron los pasados siglos, ni esperan ver los venideros”, como referiría el bravo soldado de Infantería de Marina D. Miguel de Cervantes, constituyó una acción naval que puso freno a las ansias expansionistas del imperio otomano, hasta el punto de poder asegurar que, caso de no haberse dado aquella batalla o que el resultado nos fuese adverso, el mapa de la Europa como lo conocemos sería notablemente distinto.
En aquella acción, la Liga Santa, puesta bajo la protección de Nuestra Señora del Rosario, formada por España, la República veneciana, los Estados Pontificios y otras pequeñas naciones, a cuyo frente se encontraba D. Juan de Austria, hermano del Rey D. Felipe II, contando con el concurso de un marino extraordinario D. Alvaro de Bazán, destrozó, sin paliativos, a la Escuadra turca a las órdenes de Alí Bajá.
Los Tercios de Infantería embarcados, nuestra gloriosa Infantería de Marina, fue, en una buena medida, artífice de esta gesta. Sus abordajes, con valentía y resolución, resultaron letales para los otomanos.
Más de doscientos buques turcos resultaron hundidos, apresados o incendiados. Los muertos en el bando otomano se contaron por decenas de miles -entre 25.000 y 30.000- y el poder naval en el Mediterráneo cambió drásticamente de manos.
Hoy es un día para recordar y 450 años de una gesta como esta no debería pasar desapercibida si realmente estuviésemos gobernados por políticos amantes de España y no por estos hispanófobos -socialistas, comunistas, podemía, filoetarras, golpistas y separatistas- que le dan la espalda a nuestra gloriosa Historia.
Nuestro más emocionado recuerdo para aquellos que, un día como hoy de 1571, derrotaron al turco evitando la islamización de una buena parte de Europa.
¡Orgullosos de ser españoles!
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7 de Octubre. Lepanto. LA MÁS ALTA OCASIÓN
La soberbia otomana
En su solar vencida y humillada
Por la entereza hispana
A sangre y siglos de valor forjada,
Naciente y acerada.
Terror de la nao turca
Oteando la gloria que el mar surca.
J.L.Antonaya