
El 14 de abril de 1931, en esa fecha fatídica para España empezó a tomar cuerpo y consistencia el genocidio de miembros de la Iglesia Católica y seglares que, por el hecho de pertenecer a asociaciones, parroquias o por el mero hecho de llevar un símbolo religioso en forma de medalla al cuello ya estabas condenado a muerte.
Este hecho de la llegada de la República a nuestro país provocó el alborozo y la alegría desbocada de un pueblo que en masa salió a la calle a celebrar dicho acontecimiento. Incluso la intelectualidad más conspicua dio la bienvenida a este histórico acontecimiento, me refiero concretamente al cursi y tonto de Ortega y Gasset y al solo tonto de Marañón, a los pocos días se la tuvieron que «envainar» con artículos y proclamas como el famoso «no es esto, no es esto» del cretino de Ortega. Y ¿a qué viene esta perorata de ese tiempo ya tan lejano? Pues viene a cuento porque, como he escrito más arriba, a partir de ese momento empezaron las persecuciones de curas y monjas, los espantosos asesinatos y la quema de iglesias y conventos.
¿Quién terminó con este crimen en masa de inocentes? El Generalísimo Franco y La Gloriosa Cruzada de Liberación, que, entre otras grandes gestas, salvo a la Iglesia y a sus miembros del exterminio. Vencer a la chusma roja y criminal no fue suficiente, pues, tras 40 años de paz y desarrollo a la muerte del caudillo se abrieron las puertas al socialismo y comunismo para continuar su obra de demolición
¿Y la iglesia que hizo ante esta amenaza? Se olvidó de todo lo anterior y se echó en brazos de los que antaño les asesinaban, solo hay que ver la respuesta dada a la operación destructiva del Valle de Los Caídos. El PSOE tendría que estar ilegalizado desde hace muchos años y además perseguidos sus jefes y miembros notables, su vena criminal y sed de venganza es ilimitada. Perdieron la guerra y ahora la quieren ganar desenterrando muertos, profanando templos y derribando cruces.
El Valle de los Caídos es una basílica que con el asqueroso beneplácito de una iglesia cobarde y traidora van a convertir en un museo del horror y la vergüenza y estos pajarracos vestidos de negro de la Conferencia Episcopal se reúnen para dar su bendición a la invasión musulmana que nos acecha abriendo sus brazos a las pateras y se olvidan de defender un símbolo cristiano amparado por la cruz más grande de la cristiandad.
A estos cobardes con alzacuellos El Señor les volvería a sacar a latigazos de la casa del Padre por de nuevo convertir en cueva de ladrones. Viendo este desmadre de nuestra Iglesia y sus pastores a más de un católico nos pide el cuerpo apostatar.
Esto es un fake o se trata de un artículo real de una persona real? Debe ser una broma.
Por la infame redacción del texto, yo me inclino a pensar que es un artículo real de una persona bastante ignorante. Casi mejor que fuera una broma.
Podrán borrar comentarios, pero el ridículo permanece. Y creo que la inclinación ideológica y moral de esta página no lo merece