Lo de la canción, o lo que sea, representante de España en Eurovisión, ha creado polémica entre la gente «rancia» y además fascista, a mí no y me explico. En esta sociedad asquerosa que padecemos las gentes que batallamos con nuestros principios de decencia moral cada vez somos menos y esto es tan claro como la evidencia de que nos vamos muriendo y no hay reemplazo. La batalla la tienen ganada porque nos la hemos dejado ganar con una actitud altamente permisiva que ha impermeabilizado e inundado de mierda las generaciones de nuestros hijos y de nuestros nietos.
Inoculando el virus izquierdista de acabar con la educación desde abajo, desde los primeros estratos de formación hasta la universidad en dos generaciones han llegado a imponer un relativismo mezclado con un nihilismo militante y analfabeto que acaba con todo, que destruye todo el fundamento de una sociedad moral y vertebrada en principios naturales y morales para dejarla definida y desestructurada en ese movimiento llamado woke que es el principio de la destrucción total de la civilización occidental.
Volviendo a la canción y representación visual de la misma. Que salga a recitar, que no a cantar, una anciana con pinta de «madame» de puticlub acompañada de dos maricones ejecutando una danza obscena, mientras la anciana recita una letra imposible con la palabra «zorra» como núcleo «intelectual» de la misma es solo un síntoma más de una sociedad en coma con unos principios completamente destruidos y con una situación social sin poder de reacción y, por tanto, sin posible vuelta atrás. La basura LGTBI es un hecho a estas alturas irrefutable e imposible de eliminar, está vivo desde las escuelas de los más pequeños hasta la universidad. Esto es lo mal llamado «modernidad» que está llenando los bolsillos a unas gentes multimillonarias que mueven los hilos de las sociedades con un solo objetivo, crear súbditos, ágrafos y mendigos que no tengan ninguna posibilidad de plantearse nada fuera de lo que recibirán de sus amos.
Dice el canalla de nuestro presidente del «desgobierno» que a él le gusta la canción de «la zorra» que presenta Radio Televisión y que pagamos todos nosotros. Lo que pasa, dice el miserable, es que, a la fascistada, me niego a decir «fachosfera», por cierto, palabra no inventada por él, esto ya lo decían los franceses bastantes años atrás, los fascistas, dice, hubiéramos preferido «El Cara al Sol». Este es el nivel moral e intelectual del personaje.
Hace muchos años ya llamar a una mujer «zorra» era un insulto imperdonable y si se realizaba en público castigado por la ley ¿Dónde están las feministas rasgándose las vestiduras?
Estoy en un buen momento (zorra, zorra)
Reconstruida por dentro (zorra, zorra)
Y esa zorra que tanto temías se fue empoderando
Y ahora es una zorra de postal
Esto es el estribillo… En el país de Lope de Vega, Góngora, Quevedo. En el país de compositores como Manuel Alejandro, Augusto Algueró, Perales, Serrat y tantos otros, presentamos una letra escrita, sin duda, por un descerebrado como reflejo de lo que tristemente somos, un país disparatado e inmoral.